- Mami, ¿por qué las cosas caen tan rápido que ni siquiera las ves caer?

- Yo ya elegí a mi padrino y a mi madrina. Sólo falta que me tiren las gotitas en la cabeza y ya van a ser los verdaderos.

- Mamá, ¿cuántos billetes te dan cuando terminás tu trabajo?

- Mamá, ¿qué eras vos antes de trabajar?

- ¿No podrían meterme las gotitas en la cabeza y elegir a mi padrino?

- Creo que estoy enfermo.
- ¿Por qué?
- Ayer en casa de la abuela hice "caca floja".
- ¿Pero te sentís mal?
- Un poquito, siento como si tuviera un niño jugando en mi panza...

- Como el jugo no me gustaba me tapé la nariz para tomarlo porque la boca no puede digestionar sola qué es el alimento.

- Mamám... ¿existe los tatara tatara tatara tatara tatara tatara abuelos?

Hora de la cena, durante la comida:
- Mamá, ¿qué es una prostituta?

- ¿Cuánto dura una semana?

- Mamá, ¿vos sos vegetariana? Comés mucha fruta...

- Mamá, ¿sabías que parece que papá tiene barba?

Ale, parado en la puerta de la pieza con un libro bajo el brazo:
- Mamá, tengo un cuento para que me cuentes porque ya tome la decision de irme a dormir...

- Mamá... te quiero mucho, mucho, mucho.
- ¿Mucho... cuánto?
- Como todo lo que existe... hasta lo que está por existir.

Estábamos viendo la gala de patín sobre hielo de Vancouver 2010, donde los mejores se lucían con sus coreografías:

- Mamá, ¿esto es ShowMach?
- No, Ale.
- ¡Gracias a Dios!

- Solo sé contar hasta el ciento nueve.
- ¿Como que no sabés contar más? ¿Que viene después del ciento nuuuueeeeeeve...?
- El ciento diez.
- ¿Viste que sabías?
- Mmmmmmsí... - Meneaba la cabeza, como que algo no lo convencía del todo- Pero es que el ciento diez no me gusta.

- Si los magos hacen trampa... entonces la magia no existe.

- Mamám... ¿En la playa se puede ver televisión?
- Mmmmsí.
-¿Pero como se puede ver si no hay enchufes?


Un rato después...
- Mamá... ¿En la playa llueve?

- Sería bueno que tengamos un DVD acá en tu casa.
- Y sí... está en mis planes comprar uno.
- No, no. No compres. Capaz no hace falta que compres uno.

La cara que tenía era transparente: ahí había gato encerrado y me imaginé por qué lado venía. Ajá, pensé, bueno, tomo nota y no compro nada. Dos minutos después, como quien no quiere la cosa, viene y me dice...

- Mamám, ¿te puedo contar un secreto?
- Sí.
- Papá y yo estamos pensando en comprarte un DVD para tu cumple. ¿Ves? Por eso te decía que "capaz no hace falta que compres uno"...

- Mamá, ¿me explicás qué es el alma?

- Mamá, ¿viste Aladín? Es una película de un genio, un sultán, una princesa y un tipo con un mono.

- ¿Y, chanchu, como te fue en tu primer día de clases de primer grado?

- Sí, un poquito.

- Hay algo que es como el choclo, se llama maíz.