- Papá dice que él encuentra todo en internet... pero no creo que sea así. No creo que se pueda encontrar todo en internet.

Mamá: - De todos mis chanchus, vos sos mi favorito!!
Ale: - NO tenés otros chanchus, yegua!

Como Papá Noel trae regalos sólo a los niños, Luis y Ale me compraron un regalo de Navidad.

- Papá dijo que el regalo lo tenés que abrir a la noche, pero podés verlo ahora si querés.
- No, Ale, no sería justo. Papá dijo que espere, así que no puedo verlo ahora.
- Bueno, pero Papá no lo sabría...

El niño cantando frente a la tele...

"Vamos todos muy contentos, lalalalalá... la la la lá...
todos unidos eeeesatamos...
para la navidadá la la la lá.... "

Viene, se sienta en el brazo del sillón que ocupo yo, me pasa la mano por sobre el hombro y cruza las piernas. Antes de que tenga tiempo de sonreirme por su ademán superado, me dice en tono casual:

- ¿Viste esa canción que estaba cantando? Es muy reconocida para algunas personas, porque la pasan mucho en las teles...

- ¿Por qué Santa Claus no es amigo de los niños y sólo de los adultos?
- Es amigo de los niños, Ale. Pensá que a los niños les trae juguetes.
- ¡Pero no nos deja verlo! Yo creo que Santa Claus es muy cobarde, porque no quiere que lo vean.

- Con Papá Noel, los regalos no cuestan nada. ¿No sabías que los hacen los duendes?

- Mamá... ¿Sabés jugar al ping pong?
- Sé cómo se juega, pero no juego bien. No me sale.
- Soy un poquito como vos, cuando le pego a la pelota se me escapa...

Hablando del cubo rubic:

- Mamá, ¿cómo puede ser que tu escuela aún siga abierta si vos ya sos grande?

- Comé Ale, no des mas vueltas. ¡Tardaste tanto que ya te estás durmiendo!
- No me estoy durmiendo, siento que se me va a salir jugo por los ojos.

Justo en el supermercado a Ale se le ocurrió darse cuenta que tengo puesta una remera a rayas blancas y negras y no tuvo empacho en hacérselo saber a todos gritándome desde el fondo del pasillo:
- ¡Mamá... parecés una cebra...!

El tema fue así, ayer, después del partido, fuimos con mi mamá y Ale a la cancha. Ahí nos encontramos con el Tío Iván. Estuvimos un buen rato, llegaba cada vez más gente y no había espacio ni para agitar la bandera. Fue entonces que Ale dijo que estaba cansado.

Lo llevé hasta la casa del padre y acto seguido volví a la cancha donde me entretuve, como todos, mirando a la gente con gorritos raros, muñecos, disfraces y alusivas pintadas en la cara; cantando todas las canciones de aliento para Banfield habidas y por haber; recordando gentilmente a los clubes rivales (Grana, CALA) y puteando con todas las letras a los idiotas que se seguían trepando al alambrado para saltar al campo a pesar de que por el altavoz anunciaban que los jugadores no salían a la cancha si no se bajaban.

Llegaron los jugadores, se metieron todos al campo, el campeón dió la vuelta y cuando se acabaron los fuegos artíficiales, lo que quedaba de la Abuela Graciela y yo fuimos caminando y cantando bajito para casa.

Veo entonces un mensaje de Luis en el celular donde decía que estaban en la cancha. Resulta que cuando pasaron los jugadores por Maipú y Alsina él y Ale siguieron la marcha de la gente hasta terminar en la platea, donde vieron, cómodamente, la vuelta y los fuegos artificiales. La verdad, me alegró mucho que el chancho no se los hubiera perdido porque fue un momento realmente lindo y no se lo va a olvidar más.

Hoy a la mañana, el SMS decía (textual):

"Tu hijo se levantó y sus primeras palabras fueron:
'si sos del Grana, p..., te querés matar!'
jajaja"

La cancha reventando de gente. Cualquiera que haya simpatizado alguna vez con el Taladro estaba ahí, esperando que llegue el equipo para dar la vuelta a todo trapo después de tantos años.
Ale, sentado al pie del para-avalanchas, cerrando los ojitos y apoyando la cabeza contra el pilote de hormigón:
- Cuando lleguen los jugadores, despertame.

Ayer, al terminar la ceremonia de entrega de Medallas de Jardín hubo un lunch.
Mientras los padres tomaban gaseosa y comían masas finas, Ale se puso a correr con unos compañeros.... y terminó golpeado, así que largamos el morfi y nos fuimos de la escena del crimen con el heredero lloroso y moqueando.
Caminábamos por la avenida y Ale todavía lloraba, hipaba y se acongojaba. La cara roja, los ojos hinchados. La gente pasaba, lo miraba con pena y nos miraba a nosotros como si fueramos los culpables.
Papá: - Calmate, Alexei, tratá de respirar profundo...
Ale hace un gesto de abrir grande la boca...
Papá: - ¡Por la boca no, Ale, por la nariz!
Y Ale protestó:
- ¡Es que se me salen los mocos!

Lo dijo mi hijo de seis años:
- No me gusta comer matambre. Me gusta el huevo, pero lo que hay alrededor del huevo no me gusta.

- No me gusta el hipo, me interrumpe las palabras.

-Voy a saludar a la abuela.- dijo y se fue a la casa de al lado.
A los pocos minutos vuelve pateando piedritas.
- No estan la abuela y el tío, las unicas personas que hay en la casa de la abuela son la perra y la gata.

- Yo solía amar a Cartoon Network porque tenía Ben 10, pero ahora no me pone los dibus, están dando una propaganda de panchos...

Ale tiene una verdadera obsesión con el tema de la rima de las palabras.
- ¿Pie grande y piedra, riman?
- No, chanchi.
- ¿Pie grande y pie?
- Ale, acordate que lo que rima son las últimas letras, no las primeras.
- ¿Por qué tiene que ser con las últimas? ¡Así no da interés!!

- Mamá, ¿porqué algunos dicen "te doy una mano" si no se la dan?

Cuando terminamos de arreglar unos temas por teléfono, Luis me dijo:
- ¿Te doy con el chancho?
- Dale, así lo saludo.

Y se puso Ale al teléfono. Hablamos un par de cosas... hasta que se hizo un silencio. Y lo rompió con la frase:
-¿Qué contás de lindo?

El tono de la pregunta fue tan de vieja en la cola de la verdulería que no supe qué responder, aguantaba la risa y sentía del otro lado las risitas del padre.

- Mamá, vos me dijiste que papa sabía inglés, pero él sabe inglés térmico, no de verdad-de verdad.

Hace unos días viajamos en el mismo bondi con Marcos, lo saludamos, vinimos charlando. Al bajar, Ale le pidió a Marcos que mandara saludos... algo que me pareció muy de adultos y me causó gracia.
-Me parece muy bien que le hayas mandado saludos a Silvana.- Dije yo.
- ¿Viste que Marcos y Silvana están en dos? ¿Que son novios? Hoy solo estuvo Marcos, entonces yo le pedí que le mande saludos a Silvana y al bebé. 
- Claro. - Dije. Estaba pensando en eso de "están en dos" y ya me veia escribiendo esto. No me esperaba la aclaración:

- Cuando uno se encuentra con alguien, si otra persona esta casado con él o es amigo de él entonces si la otra persona lo conoce hay que decirle que nos mande un saludo a la otra persona.
-Ajá.

Ale, desde la rama del olivo, a un metro y medio del suelo:
- Mientras más crezco más miedo me da bajarme.

- ¿Del hijo de mi hermanita, yo voy a ser el tío, no?
- Vos no tenes hermanita, Ale.
- Todavía.

- ¿Mamá, que edad tenías vos cuando nació tu hermano, el tío Iván?
- ...




(Yo, tenía 5 años y nueve meses, no quería que asociara que él tiene seis años y cuatro meses...)

- Mamá, ¿en el Polo Norte se canta o no se canta?
- Mmmmm yo creo que sí, que se puede cantar.
- Yo creo que no, nunca ví a un pingüino cantar.

Entramos al Super y Alexei venía tomando un juguito. Le pido que lo termine, le muestro el envase vacío al de seguridad y lo tiramos en un tacho ahí en la entrada.
Entonces le explico a Ale:

- Teníamos que tirarlo porque acá venden jugos como ese. Y si te veían tomando ese jugo podían pensar que vos habías agarrado uno de acá. ¿Y qué hacíamos si pensaban eso? ¿Eh?
- ¡Hubiéramos tenido que salir corriendo!

A cuento de nada...

- Akela tendría que dejar de protestar tanto.

Este fin de semana que pasó Alexei tuvo su primer Campamento Scout con el Grupo Santa Rosa de Lima, del Distrito 6.

Estaba en la pieza nebulizándome cuando siento el grito:
- ¡Mamaaaaaaaaaaaa...! ¡Una araña!!!!
- ¿Grande o chica?.- Pregunto. Voy al lado práctico si es grande, es comida para Arizona. jeje
Si es chica, no le hace daño a nadie.
- Mediana.- Me responde Ale y estirando el cuello lo veo trepado arriba del sillón mirando al piso atentamente. Termino de nebulizarme y cuando paso al comedor, tres minutos después, me informa:
- La dejé escapar.
- ¿Le abriste la puerta del patio?
- No, me quedé arriba del sillón hasta que se fue...

Hablando de las vacaciones que pasamos en Córdoba:

- ¿Te gustó ir? - Te pregunté. Y respondiste que sí, tal como yo pensaba. Y entonces te confesé mi más caro sueño en este momento:

- Vamos a ver si este verano podemos hacer un viaje parecido, ir varios días a un lugar lindo.

Y respondiste, pensativo:
- Podemos ir a otros lugares, como Tahití o Mar del Plata.

Charla con Papá, durante el desayuno de hoy:


- Quiero que nos quedemos en esta casa para toda la eternidad y cuando vos seas ancianito y yo sea MAS adulto nos mudamos a una casa mas nueva, porque esta va a ser viejita ya.

- Ale, ¡todavía no juntaste los juguetes!
- Yo tengo ganas de juntar los juguetes... pero no tantas ganas.

Alexei aprendió a jugar ajedrez.

Anoche, mientras yo limpiaba la cocina, se puso a jugar solito y anunciaba en voz alta cada movida a su contrincante invisible, por ejemplo: "Ahora voy a mover la torre" o "Ahora te voy a comer este alfil".

En una de esas escucho:

- Voy a mover el caballito.

Seguido de golpecitos en el tablero (uno por cada casilla), acompañados de una sílaba: "ca-ba-lli-to" como si estuviera saltando al elástico o algo así.


Nota dos días después:
También funciona con la torre:
- "To-rre-ci-ta..."

- ¿Vamos a utilizar la bañera hoy?
- ¿A qué viene esa pregunta?
- Es que si la vamos a utilizar no debemos llenarla con tanta agua, porque estamos desperdiciando el agua de la Madre Naturaleza.

SMS de Luis:

Mientras juega a la play, se escucha:
- "...♫...por que soy la vida, vengan a beber... a tu amor eterno llévanos señor... ♫..."

Conversación de sobremesa.

- Mamá, ¿por qué los chicos se van a dormir y los grandes se quedan viendo tele?
- Porque los chicos tienen que dormir mucho para crecer.
- ¿Vos no crecés?
- No. Yo ya soy grande.

- ¿Por qué no crecen más los grandes?
- Porque ya crecieron. Las personas cuando ya son grandes dejan de crecer.
- Ah... ¿entonces el cuerpo empieza a deshabilitarse?

- ¿Mamá, los niños callejeros cruzan solos la calle?

Miro de reojo el reloj pulsera, son las 10:35 de una mañana dominguera.

Decreto mentalmente que ni ahí me levanto antes de las once. El pueblo me ovaciona desde la Plaza, con medidas populistas como esa seré reelegida una y mil veces. Empiezo a adormecerme otra vez, ya estoy pensando incoherencias...

El niño se agita en la cama, con infalible sexto sentido percibe que estoy semi-despierta y pregunta:

- ¿Me puedo levantar?

Mientras junto energía para responder lo de siempre en estos casos ("Bueno, pero vestite, ponete las medias y las zapatillas, ¡no andes descalzo!"), lo siento susurrando bajo la frazada, cual mantra tibetano, las palabras archirepetidas mil veces antes, que lo liberarán de la tiranía de las sábanas:

- "Buenoperovestite. Buenoperovestite. Buenoperovestite. Buenoperovestite. Buenoperovestite. Buenopero..."

El grito llegó desde el baño:

- ¡Mamaaaaaaaá! ¡Hay un bicho en la bañera!

Cuando me asomo me señala un mosquito aplastado es un rincón del baño, y especula:

- Me parece que es un "dengue".

Ale empezó a ir a los Scouts. Todavía no había mencionado el tema y les debo otras anécdotas al respecto, pero esta es necesariamente posteable, y a la brevedad posible.

Llegamos el sábado pasado al Grupo y no hay nadie. Llamo por celular al padre de la criatura para confirmar el tema y durante la conversación se menciona el nombre de Roxana.

Cuando corto, Ale me pregunta:
- ¿Quién es Roxana?
- Es la jefa del Grupo.- Le respondo.

Y entonces, se le ilumina la cara, como quién descubre que la canción del "Payaso Plin-Plin" y el "Feliz Cumpleaños" tienen la misma melodía.

- Ahhh, entonces es por eso que cuando los Scouts van a Misa cantan "Roxaaaana, Roxaaaaana".

- Mamá, ¿sabés por qué giran los engranes?

Alexei, muerto de sueño al final del día, llorando porque no puede pasar de nivel en un juego de la playstation y el padre lo quiere llevar a bañar antes de acostarlo:

- ¡Esta no es la vida que yo quería!

- ¿Qué comiste hoy en el jardín?
- Pollo con puré de batata.
- ¿Y de postre?
- Algo como batata pero cortado en cuadraditos y a veces en rectangulos.
- ¿Dulce de batata?
- Sí, eso.

Terminamos de almorzar. Estoy levantando las cosas de la mesa y le digo a Ale (que está desde la mañana armando una super máquina de hacer no sé qué cosa):

- Ale, traeme los vasos.

A mis espaldas escucho una vocesita simil robotizada, tipo autómata que dice:

-Sí, mi a-mo.

- Qué bueno, ahora puedo ver este capítulo de Naruto. Lo daban el otro día pero tuve que apagar la tele porque nos fuimos al lavarropas.

- No podré entrar más al pelotero de Mc Donalds.
- ¿Por qué?
- Porque ya mido más de ciento veinte centímetros, y los niños de más de ciento veinte centímetros no pueden entrar.
- ¡Uy, qué problema!
- Papá dice que si no me paro cerca del medidor nadie se dará cuenta...
- ... y no...
- ... pero yo creo que es mejor decir siempre la verdad.

Me enternece que me haya dicho que en honor a la verdad debe renunciar a su placer supremo, jugar en los peloteros de McDonald's.

Igual, en su mundo Nickelodeon eso de "decir siempre la verdad" es relativo...

- Papá y yo estamos pensando mudarnos más cerca del Jardín.

Estábamos mirando una peli mientras almorzábamos * cuando la imagen se convirtió en rayitas y luego en una pantalla azul.

Mamá (Pensando: "Telecentro y la put4 m4dr3 qu3 t3 r3 m1l v3c3s p4r10!"):
- Uy, se cortó el cable!!
Ale:
- Ahora tenemos que llamar al enchufador de cables para que lo arregle.

Alexei no es solo un comentarista de primera. También es desubicado como pocos.

La suma de muchos comentarios + desubicación alcanza el punto más alto cuando la madre está frente a la familia de su novio.

Desde luego, es un niño y sólo eso lo salva de morir de maneras crueles mínimo dos veces por día cuando elige momentos como el almuerzo en casa del novio para hacer comentarios del tipo:

- Mamám... (primero: captar atención, prepare la fuente)
- ¿Sí?
- ¿Te puedo decir algo? (segundo: garantizar el permiso materno, acomode los ingredientes)
- Sí, decime.
- ¿Por qué cuando alguien se tira un pedito en el Jardín mis compañeros siembre dicen que fui yo?

17:13 02/08/2008

- Mamá te quiero mucho.

- Yo tambien te quiero mucho. ¿Vos por que me querés?

- Porque tengo amor en el corazón.

Viajando en un micro de esos que tienen rampa y espacio para las sillas de ruedas,
Ale miró la clásica calcomanía y comentó:

- Este colectivo es para gente de ruedas también.

Estabamos viendo una propaganda de un programa que resume bastante eso de que la TV es basura...

- Mamá, ¿Te gusta ShowMatch?
- No, no me gusta. ¿Y a vos?

Por un momento toda la obra educativa de mi vida pendió de un hilo:

- A mí no me gusta porque "siempre a veces" (sic) que lo miro hay gente desnuda, todo lo hacen desnudos, y no es muy linda la gente desnuda.

- El postrecito de Lauti fue vencido, porque Carol lo empujó (a Lautaro) y sin querer ( Lautaro) piso la mochi y se arruinó el postrecito por no ponerlo en la heladera.

- Mamá, ¿sabés qué nombre te pondría si fueras un dibujito?
- ¿Cómo?
- SuperMamá.

El otro día vino Ale y me dijo:

- Mamá, sos mi mejor programa.

Me derritió.

Debo empezar por aclarar que tenemos una tarántula de mascota, y que se llama Arizona...

- ¿Qué hacés mamá?
- Estoy poniendo una araña que atrapé en el terrario de Arizona.
- ¿Para qué? ¿Para que la coma o para que hagan un niño?

Para que no se le "caigan" del plato, le corto los tomatitos cherry por la mitad así los come sin accidentes. Pero bueno, el problema de los tomates no se termina tan fácil...

- Mirá mamá, se me cayó una mitad de tomate al suelo.
- Bueno, juntala y andá y tirala en la basura.
- Okey.

El niño se levanta contento de la mesa, junta el medio tomate de abajo de la silla y va a tirarlo al tacho de basura mientras la sádica de la madre dice con tono inocente:

- Mientras, yo te pongo otro tomatito en el plato. Por cada medio tomate que se te caiga vas a tener que comer otro tomate entero.
- Oooookeeeeey.

- Papá me dijo algo muy gracioso el otro día.
- ¿Qué te dijo?
- Que deje de comer pan y pan y pan y me coma los ravioles que se están matando de risa en el plato.

- Los tomates pequeños, circulares, completos... a veces se escapan del plato cuando los pinchás.

- Mamám...
- ¿Qué?
- Te quiero más que a Ben10.

- Hay dos clases de cuchillos, los extra grandes y los pequeños, y de los pequeños están los que tienen... los que son como un serrucho y los que no tienen eso de serrucho.

- Ale, ¿querés ayudarme a cocinar?
- ¡ ¡ ¡ Sííííííííííííííííííííí ! ! !
- Bueno, andá a lavarte las manos.
- Ehmmmmmmm... creo que mejor no.
- ¿Mejor no?
- No, mejor no cocino...

- Recuerdo lo que le pasó a una compañera mía del otro Jardín, del Jardín Soles (salita de 4 años).
- ¿Qué le pasó?
- Ella era pequeña, usaba pañales todavía. Y un día no se dió cuenta y sin querer hizo caca en la pileta...
- ...
- ...usaron nuestras palas de juguete para sacar todo.

Por si acaso no había sido lo suficientemente explícito, remarcó:

- Usaron las palitas para sacar toda la caca.

- ...y si una taza tiene dibujos es de un nene o de una nena.
- ¿Por qué? A veces los grandes tienen tazas con dibujos.

Me miró curioso y le lancé un argumento irrebatible:

- Yo podría tener una taza con un dibujo de Barbie, por ejemplo. A mí me gusta Barbie, cuando era chica jugaba con muñecas Barbie.
- ¡ ¡ ¡ ¿ Existía Barbie ? ! ! !

Perdimos una gran promesa futbolística.

El nuevo astro del futbol argentino, émulo de Eber Ludueña, Alexei "el Chanchu" Orozú ( ese que cuando le hacen un pase corre tras la pelota de futbol y la agarra con las manos para después tirarla en cualquier direccióncon gracia indescriptible), estando en un momento crucial de su carrera, a punto de ser vendido al Manqueenchastre en seis millones de euros y tres postrecitos Royal de Frutilla, se ha lesionado en el día de la fecha al resbalar en un charco de agua de lluvia en casa de sus abuelos paternos.

- Ale, ¡dejá de tirar cosas abajo del sillón!
- No estoy tirando cosas, estoy tratando de sacar algo. Pero parece que solo empeora.

- Ale, levantate el pantalón, que se te ve la raya de la cola.
- ¿Por qué la cola tiene raya?

- Mamá, ¿como hace Santa Claus para entrar por la chimenea sin ensuciarse?

Domingo a la mañana. Estamos invitados a un asado en casa de Adrián:

- Algunas personas venden la ropa que ya no usan. En casa de papá tengo un buso con olor a vino. Quisiera venderlo.

El niño mira la en tele cosas incomprensibles (Como Ben 10) y busca que yo le dé respuestas:

- Si Ben estaba en el camper... ¿quien estaba salvando el día??

- El confeti es algo que en las fiestas cae, cuando los felicitan por algo.

Después del desayuno levanté las tazas y debajo de la mía había una aureola. La reflexión no tardó en llegar:

- Siempre las tazas se pueden humedar, o sea, ponerse algo húmedo.

- Van a dar la peli de los Simpson hoy.
- Prefiero ver Pokemon.
- Ufa, Ale, a mí Pokemon no me gusta.
- Algunas partes no son de pelea, mamá, son de entrenamiento.

- Ale, ponete la camiseta de mangas largas.
- Ahí voy, en cuanto me ponga las medias.


"En cuanto me ponga las medias.", dijo mi chanchito, con una corrección gramatical que hasta el Honorable Jurado de Felíz Domingo aprobaría.

Y hablando de Felíz Domingo, pasen por este link y hagan un tour por el recuerdo.

- A Lauti ya no le gusta Ben 10, ahora le gustan los Power Rangers.

- Mamá, necesito un trapito para secar la mesa.

No pude evitarlo, y estiré el cuello para ver la magnitud del desastre. Ale encogió los hombros y se excusó:

- Cuando uno es niño y toma jugo, a veces ocurren accidentes.

- Ale, ¿qué opinás de la gripe?

- ¿Porcina?

- Sí.

- Que es mala.

- Mamá, ¿te gusta "Tom y Jerry"?
- Sí. Yo lo miraba cuando era chica.
- ¡Papá también!
- Y sí, Ale. Es que veíamos las mismas cosas cuando éramos chicos.
- ¿¿Eran hermanos??

- En su nueva casa, papi tuvo que armar la mesa y puso las cosas encima y yo tuve problemas con eso.
- ...
- Tuve un accidente.
-...
- Siembre me olvidaba que no estaban abrochados y... ¿sabés lo que pasó?
- Nooooooooooo. - La palabra "problemas" me sugería una idea, pero no quise prejuzgar.- ¿Qué pasó?
- Derribé unas cosas.

- Mamá, ¿por qué Dios nos tira piedras?

Fuimos un día a McDonald's y al otro día estábamos descompuestos los dos. El médico nos recetó una dieta desabrida durante diez días.

Sin embargo, por unas cuántas semanas evité llevar a Ale de nuevo a comer hamburguesas. Dado que a la salida del colegio pasamos por uno de esos locales infernales que exiben impúdicamente sus publicidades en la calle, Ale inistió en entrar y la madre, cruel e inflexible, dijo que no.

La comparación con su santo padre, progenitor de sí fácil y penitencias flexibles si los hay, no se hizo esperar:

- ¡El otro día fui con papi a ManDonalc's (sic) y no me dió dieta!

- Ale, ¿me acompañás a votar?
- ¿Para qué?

- ¿Viste mamá? Los días que hace frío como hoy, cuando hablamos las letras se convierten en humito.

El intruso - QEPD- probablemente escapaba de la ola de frío. Paradógicamente, fue a morir atrás de la heladera.
El niño me observa barrerlo hacia la palita. Curioso, pero a conveniente ditancia.

- ¿Qué es eso?
- Es un grillo muerto. ¿Querés verlo?
- No, me da miedito.
- Bueno.
- A mí me dan miedo los insectos parecidos.
- ¿...?
- Porque las cucarachas y los grillos sos parecidos. Son como de la misma familia.

El domingo 24, camino a un bautismo:

- Mamá, tengo que decirte algo. (me hace gestos de que me agache, para decirme al oído)
- ¿Qué?
- Recordá que yo odio la iglesia.

Me vengo a sentar en la compu, tengo diez mil cosas para postear... pero viene Ale y me dice:

- Mamá -la boca era un puchero - quiero ser un niño bueno el resto del año... Sólo los niños buenos reciben regalos de Santa...

Empecé a despertarlo suavemente. No eran las nueve todavía y pensé que me iba a costar un montón sacarlo de la cama. Cuando abrió un ojo le dije:

- Vamos, Ale, hay que levantarse que en un rato viene papi a buscarte.

Y el desgraciado se levantó en un segundo, corriendo al baño al grito de:

- YAHOOOO! AL ZOOLOGICO...!

Lástima que de lunes a viernes no reacciona así cuando lo despierto para llevarlo al Jardín de infantes. :P

- A veces cuando me entran agua o cositas peluditas en la nariz siento que voy a estornudar.

Papá se va de viaje y Ale está desolado.
Me pidió escribirle una cartita "por la computadora".

Hizo un dibujito en el Paint, le adjuntó unas cosas escritas (yo las escribí en un papel y él las copió) y me avisó que estaba listo. Lo guardé en formato BMP para la posteridad y le dije:
- Ahora vamos a casa de la abuela y lo mandamos por mail.
- No, por mail no. Por computadora.

Fascinado con la letra "A", por que su nombre empieza así, Alexei siempre busca palabras con A.
Cuando "descubre" una nueva, viene corriendo a decírmela...

- Mamá...! Mamá...!
- ¿Qué?
- ¡Encontré otra palabra que empieza con A!
- ¿Cual?
- ¡"Amburguesa"! 

- ¿Para quien son esos dos huevos Kinder?
- Para vos.
- ¿Los dos?
- Sí. Uno para después del almuerzo y otro para más tarde.

Me abraza y me siento feliz y desbordada.

- Te amo, ¿sabías?
- Sí, bueno... ¿Tenés un lápiz? Porque quiero dibujar el Omnitrix...

- Mamám...
- ¿Qué?
- ¿Qué es eructar el alfabeto?

- ¡Mamá, mirá lo que hice!
- ¿Que hiciste?
- ¡Adiviná!

Se acerca y mira la pantalla con ojos codiciosos. Apoya su mano en mi hombro. Yo sentada, él de pie. Estamos a la misma altura. Nos miramos a los ojos.
- Mamám...
- ¿Qué?
- Quisiera usar la compu.
- Ale, estoy yo usando la compu.
- Bueno, te dejo pensarlo. Cuando lo decidas, avisame.

Abuela - ¿Comés zapallo?
Ale - No.
Abuela - Pero es naranja... (WTF??)
Ale - Solo me gustan el chupetín de naranja, el jugo de naranja y la naranja completada.

Un domingo por la tarde:

Ale, suspirando: - ¡Estoy agotado...!
Mamá, ilusionada: - ¿Vamos a dormir la siesta?
Ale, espantado: - No. No estoy cansado...

- Una habichuela es algo verde como un poco larguito.

- Mamám... me encanta tu voz cuando estas felíz, pero cuando estás enojada no.

- Si mezclamos zanahoria y brócoli... ¿sabés qué podemos formar?
- ¿Qué?
- Brocoria.

- Mamám... ¿Te acordas de nuestra primera Navidad con nieve?*

Tocamos el timbre y nos cansamos de esperar.

Golpeo la puerta un par de veces, apoyo el oído en la madera para ver si al menos el perro ladra y no se escucha nada.

Ale me dice, desolado:

- Creo que tendremos que irnos. Me parece que la puerta de Dani no anda.

Situación de probador.

El niño de 5 años y medio tapándose los ojos mientras la madre se prueba unas camisitas de gasa floreadas (re lindas, re de oferta, con precios re bajos) que hicieron re mierda mi presupuesto del mes. Autoregalo de cumpleaños anticipado, le dicen.

Me miro al espejo, me gusta como me queda, sonrío.

Ale se despacha con un piropo inesperado:
- Estás bonita, mamá.

Su "bonita" me hace feliz. Hasta que agrega...

- Ese disfraz te hace parecer cubierta de flores...

"Algunas cosas no son lo que parecen. Una medalla parece una moneda, pero no es una moneda."

Salgo un poco tarde del trabajo, llego a casa de mi mamá a buscar a Ale y saludo a todos desde lejos.

Tengo el ojo irritado por una conjuntivitis que no sé si es tan virósica como la que el año pasado tuvo Ale, pero que seguro-seguro es contagiosa y no quiero joderle la vida a nadie.

Ale está tomando la merienda y aunque hace un día y medio que no lo veo y me muero de ganas de estrujarlo, me limito a hacerle una caricia en el pelo.

Salta la Abuela, defensora de los pobres y de los nietos únicos:

- Che, ¡dale un beso a tu hijo!
- Mamá, -le digo señalando mi ojo- ¿no ves que no puedo?
- ¡Ahhhhh, cierto! - dice ella.

Y Ale, enciclopédico como siempre, acota:

- No puede tocarme porque tiene el ojo enfermo y si me toca mucho yo me contagiaría y no quiero tener otra vez juntitivitis.

Ale estaba escribiendo en la compu. Como su conocimiento de las letras es parcial, viene y me consulta cosas que quiere poner... Yo estaba leyendo, así que le mostraba las letras por las que me preguntaba en lás páginas del libro que tenía en las manos.

- Mamam...
- ¿Sí?
- ¿Como se pone papá?
- Con una P, y con una A y después otra P y otra A: PA-PA
- Gracias... - me dice, y se va contento a escribirlo.


Dos minutos después vuelve y consulta...


- Mamam...¿Como se pone mamá?
- Con una M, y con una A. Y despué M y otra A: MA-MA
- ¡Ah! Sí...

Al ratín, se acerca otra vez:


- Y mami, ¿Como se escribe "hijo"?
- Con una H, y con una I y....
- ¡Ah! Ya recuerdo.... -me interrumpe, y se va corriendo a la compu.

Termina lo que estaba haciendo y me llama entusiasmado para que lo vea.
Cuando me acerco a ver, había escrito esto:
PAPA   MAMA    HIHI

Hora de la merienda.

Alexei tomaba el te con leche haciendo mucho ruido al sorber. El tema ya era irritante, y encima estábamos de visita en el peor lugar donde un niño puede hacerle eso a su progenitora: la casa del novio. :P

Para colmo de males, la escena transcurría frente a la madre, el padre, hermanos, cuñadas y sobrina del caballero en cuestión.

Patearlo por debajo de la mesa no hubiera servido, y mis miradas caníbales eran pasadas por alto.

- Ale... - yo ya tenía los dientitos apretados - Por favor, no hagas ruido al tomar el té.
- ¿Por qué? No hay nadie durmiendo.

- ...y le dió el juguete a lautaro y después se lo sacó. ¡No es así la vida!
- ...
- Uno no puede sacarle a alguien lo que ya le dió.

EL oído de mi niño abastece con su producción de cera el 49.99 % de los requerimientos de materia prima de la industria de las velas artesanales.

Hoy temprano, después del baño, mientras le limpiaba las orejas con cotonetes a mi chanchu, reflexionó y me dijo muy serio:

- Cuando uno va a comer un chancho le revisa las orejas, entonces, si las orejas estan sucias, se las corta y se lo come.
- ¿O sea que si te quiero comer a besos te tengo que cortar las orejas primero?
- Naaaaa...!

Sábado Morning, me despierto justo para ver cuando el enano se levanta medio zombie de la cama y pasa al comedor como quien se mueve por su casa en ausencia de visitas. Es decir, en calzones.

Gracias a que desde mi almohada tengo el ángulo justo para ver el sillón y que la puerta del dormitorio está siempre abierta, lo veo sentarse en el living y ponerse a jugar con sus cositos para armar cositos, luego de, ocviamente, prender la tele y sintonizar un canal infantil.

Me dispongo a alargar mi momento de fiaca mañanera mientras sea posible y no puedo, no puedo, me meo de risa, cuando escucho su vocecita cantando:

- Mirá Ale, mi jefe fue a Disney y me trajo un muñequito de Nemo.- le dije, mostrándole el peluche.
- ¿Fue a Disney?? - me preguntó socarronamente, con tono de: "estás segura vos, nenita?".
- Sí.
- ¿Y cómo fue?
- En avión. -le aclaré, todavía sin entender por qué tanto asombro.
- Si tu jefe fue a Disney, yo quiero ir a Cartoon Network.

Ibamos a visitar a mi amiga Silvana, que está de 5 meses y contando:


- ¿Sabés qué es lo bueno de un bebé?
- ¿Qué?
- Cuando sale. Porque entonces podés tener la panza llena, porque cuando está el bebé se come toda la comida.

Ale - A veces se puede aprender solo. A veces no necesitás que te enseñe un maestro.
Mamá - ...
Ale- Podés aprender cuando vas aprendiendo.
Mamá - ...

- ¿Sabés cuánto me tomó aprender a decir las vocales?
- ¿Cuánto?
- ¡Como un millón de años!

- Mamám, ¿sabés qué? Me gusta mucho el día del Padre. Y el día de la Madre... ¿Falta mucho para el día del niño?
- ...
- Otro día que me gusta es el de los explotones*, es mi favorito.

- Mamám...
- ¿Qué?
- Hace mucho que no vemos a la Primavera.

Dejamos atrás la casa de papá rumbo a unas gloriosas vacaciones de cuatro (4) días y tres (3) noches en la Ciudad Capital de la Fe, el mejor destino que el bolsillo que una modesta trabajadora con tantas cosas que arreglar en su casa como yo puede permitirse por menos de 300 pesos.

Camino a la estación de Banfield me puse didáctica:

Mamá ( con tono de maestra jardinera ) - Bueeeeeno, ahora vamos a ir a la estación, vamos a tomar el tren a Capital y cuando lleguemos a Constitución, que es la última estación del tren, vamos a subir a otro tren. ¿Te acordás del tren ese que anda por debajo de la tierra?

Alexei ( con tono de niño prodigio superado por la imbecilidad que lo rodea ) - Se llama Subte.

- Por que los micros que tienen escalera para subir (al segundo piso) tienen baño y este no?

- Mamá, mirá tengo un granito.

- Sí, dejalo.

- Mamá... ¿ este granito infecta?

¡Qué lindo que es tener un chanchito mimoso!
Con la excusa del abrazo, conseguí que se quedara un rato más haciendo fiaca conmigo antes de levantarnos.
Por la ventana abierta, los rayos de sol iluminaban el polvillo que flota en el aire.
- Ya están entrando los cositos del sol... ¿te explico qué son?
- ¿Qué son?
- Son esas cositas pequeñitas, como polvo o insectos o aves.

- Mamám... ¿vos llegaste al final del arcoiris?

Viernes a la noche. Delivery night.
- ¿Comés otra empanada, Ale?
- Ehhhh, sí.
- ¿De pollo o de jamón y queso?
El gesto de "estoy pensando" que pone me da ganas de comerlo a besos...
- Mamá ¿cuales eran las empanadas que yo odiaba?
- ¿Vos odiabas unas empanadas?
- Sí. Pero no recuerdo si las de pollo o las de carne.
- ...
- Porque las de pollo y las de carne se parecen. Pero las de carne son un poco "moraditas".

No alcanzó con despertarme a vómito limpio, suponiendo que semejante contradicción exista.
Encima jugó con mis sentimientos de una forma vil...
Engañome cual sirvienta paraguaya.

- Mamám...
- ¿Sí?
- ¿Sabés cuanto te quiero?
- ¿Cuánto?
- Te quiero como el sol y las estrellas y los planetas y todo lo que existe.

Me muero de amor, me derrito, me desago en abrazos y besos y le digo que yo también lo quiero muchísimo. Me suelta. Se incorpora.

- ¿Ahora me vas a compara el juguete que yo quiero?
- ¡Cerdo! ¿Por eso me dijiste que me querías? ¿Para que te compre un juguete??
- Noooo, te dije que te quería para decírtelo. De todas formas... ¿me comprarás un juguete?
- ¡...???...!
- ¿De qué te reís? ¿De qué te reís, mamá?

- Algunas creaturas comen a otras creaturas. Porque cuando una creatura que está viva se muere, se la comen otras creaturas.

Los domingos no están hechos para levantarse antes de las diez de la mañana... Yo ya estaba despierta y no pensaba moverme hasta que fuera realmente necesario. El niño abre los ojos y ya quiere salir al mundo.

- ¿Nos levantamos, mamá?
- Espera que mamá se está desperezando un poco.
- Bueno.

No sonaba muy convencido, de hecho, dos segundos después, se sienta en la cama:

- ¿Me levanto?
-  No, Ale, esperá un poquito.
- Bueno, te espero sentadito. Te esperandito.

- Mamá, sabías que yo tengo dos tubitos acá (se toca el pecho) uno para los alimentos y otro para las bebidas.
- ...
- Y cuando se llenan, entonces crezco.

Revolviendo en la cartera para encontrar las llaves y abrir la puerta de casa, veo el bocadito Holanda que compré hoy temprano...
- ¿Te portaste bien, Alexei?
- Sí.
- Tomá.
- ¡Uuuuuy qué bueno...!
-¿Qué se dice?
- ¡...un chocolate!
- No Ale, se dice "Gracias"...
- ...ah, así, gracias.

- Mamamm, ¿cómo se llama eso chiquitito que se parece a un telescopio?
- Microscopio.
- Ahhh...! Sí.

Hubiera sido casi romántico si no fuera porque mi compañero de mesa me relataba paso a paso todo lo que sucedía en la pantalla de Cartoon Network mientras se limpiaba las manos en la ropa.

Entre todo lo que tuve que escuchar, lo más desconcertante llegó a la hora del postre:

- ¿Por qué la ensalada de frutas de llama "ensalada de frutas"?